En el día de hoy nos dejo Daniel Celentano, nuestro Director Ejecutivo y Tesorero. Su participación en la industria, y sobre todo en nuestra ATVC y en la ABT, fue uno de los pilares para la consolidación del sector. Siempre con su inconfundible estilo y bonhomía, fue un actor central de la construcción y concreción de iniciativas.
El “Tano”, el cariñoso apodo con el que todos lo nombrábamos y seguiremos nombrando, era un amigo leal y un impulsor incansable de acuerdos para llevar adelante los objetivos que la industria y sus empresas precisaban.
Las décadas que con él hemos compartido, están plagadas de anécdotas sobre su sentido del humor, conversación inteligente y, ante todo, sobre el gran tipo que hoy nos deja físicamente.
Es un enorme dolor, pero ha sido un inmenso gusto haber caminado y trabajado con él. Su recuerdo siempre nos arrancará una sonrisa.

Hasta siempre Daniel, gracias por todo.